Pasadas las diez de la mañana el júbilo del Domingo de Resurreción invadía las calles linarenses. Las túnicas inmaculadas de la Hermandad de la Resurrección se dejaban ver desde el barrio de Santa Bárbara por la carretera de Baños rumbo al centro de Linares.

Con la Cruz de Guía en silencio y seguida por un numeroso tercio de nazarenos empezaba el cortejo procesional. Lo seguía el paso de misterio, este año ya con parte de la canastilla tallada. Le acompañaban los sones de la A.M. Ntro. Padre Jesús de la Pasión.

Al final de la estación de penitencia, ya cuando se enfilaba la cuesta de San Pedro, se produzco un pequeño incidente en el paso de misterio. La potencia central de Cristo quedaba doblada al interponerse un cable. Afortunadamente no pasó a un mayor problema, enderezándose rápidamente por un hermano costalero.

Como siempre la subida de la Cuesta de San Pedro es un momento muy especial en el recorrido de esta hermandad. Cientos de personas "cangrejean" frente a los pasos hasta llegar a los pies del campanario del templo. Allí, a la llegada del paso de Ntra. Sra. del Amor Hermoso se produce la mayor "petalá" de Linares.

Entorno a las cuatro de la tarde hacía entrada en el templo Ntra. Sra. del Amor Hermoso poniendo así punto y final a la Semana Santa linarense del año 2009. Ya todo pasó.