jueves, 25 de junio de 2009
En la Semana Santa de 2008 ocurría un hecho insólito en la mañana del Viernes Santa. El Señor de Linares realizaría su segunda bendición en la Plaza del Ayuntamiento, sitio en el que nunca (al menos que yo tenga constancia) lo había hecho. Delante de la Casa Consistorial, Ntro. Padre Jesús Nazareno bendecía un año más a todos los linarenses.
Ya estaba programado para el año anterior pero por inclemencias meteorológicas la hermandad no pudo hacer estación de penitencia y por lo tanto no se pudo realizar la segunda bendición. Sin embargo, la primera sí se produjo, dejándonos otra estampa inédita. Se producía a las 8 de la mañana ya con la decisión tomada de no realizar estación de penitencia. Se producía en el interior del templo de San Francisco, delante de su capilla. Un momento inolvidable.
Recuerdo otro año que también por amenaza de lluvia se decidió no subir a la Glorieta de América (lugar tradicional durante muchos años) realizándose esta segunda bendición a los campos en la Plaza de la Constitución. Justo donde se tenía planificado para esta pasada Semana Santa que como todos sabemos no se produjo por la lluvia.
La historia nos cuenta que anteriormente a la guerra cívil, Ntro. Padre Jesús Nazareno realizaba la bendición en el Ejido de San Sebastían, lugar ocupado hoy por el templo de San Agustín y la plaza de San Juan Bosco. Era la llamada bendición a los campos, ya que esa zona de Linares era poco menos que las afueras. Además, era quizá la única que se hacía. La ceremonia se denominaba "El Paso" y recreaba el encuentro de Jesús con su Madre y San Juan.

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